Se empezó el viernes con un rodaje largo a ritmo interesante, que pasaría factura al día siguiente.
El sábado tocó madrugar para ir a la sierra de Madrid a subir el Peñalara y Claveles, pudimos disfrutar de un pefect day pseudoalpinsta. La semana y el comienzo de su fin estaban causando estragos en las piernas, pero daba igual, porque hoy acechaba una chusticarrera en Ciudad Real.
Esta vez el mapa si es tan pajísima como parece, aunque la niebla cerrada que se lo ha comido ha hecho la carrera mas interesante. Hay que decir también que ha estado divertida, 4.5 km casi sin desnivel y con la parte final mas típica de micro. Esta zona por lo menos te despegaba los taconazos de vértigo que les habiamos robado a los sembrados.
Buenas sensaciones antes de mi despedida deportiva hasta Marzo, ya que este martes me operarán y estaré 6 semanas de baja. Sin más, a reventarlo mañana en los tresmiles, que hay tiempo para recuperar!
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